Los cuatro años que Fushi vivió con una familia lo hicieron más humano, pero esta vida tranquila ofrece tan pocos estímulos que apenas logró hacerse con nuevas adquisiciones. La paz llega a su fin cuando es atacado por un golpeador en la fiesta del cumpleaños de Lyn. ¿Será capaz de derrotarlo y proteger a todos con ayuda de Gugu?